No hay cosa más gratificante que hacer justicia a un amigo, más si ese amigo lleva ochenta años escribiendo para la gente sencilla. Juan Gallardo Muñoz, al que algunos de vosotros conoceréis por el seudónimo de Donald Curtís ha publicado sus memorias. Esas memorias que comienzan huyendo de Madrid en un tren nocturno en plena Guerra Civil, y las vicisitudes que ha pasado hasta ser reconocido, con ochenta años, por una gran editorial. Juan es contemporáneo de Silver Kane, Keith Luger, Frank Kaudett, etc. Son esos héroes de las novelitas de a duro, como eran conocidas, que tuvieron un ejército de lectores. Lucharon contra las editoriales, contra la censura y contra los tiempos, esos tiempos cambiantes que les hacían acoplarse a los mismos sin dejar a estos escritores que derramaran la calidad que atesoraban. En el caso de Juan o Donald Curtís, le fue reconocida, por ejemplo por Juan Carlos Onetti, el genial escritor, por el que fue felicitado varias veces. También por el actor George Sanders o el dramaturgo Buero Vallejo quienes le animaron a escribir en el segundo caso mientras actuaba en su compañía de teatro en la que era segundo actor, concretamente en la obra EN LA ARDIENTE OSCURIDAD.
Estos novelistas anteriormente nombrados tienen el honor de que universidades de Norteamérica cuenten con sus ejemplares en las bibliotecas, con los que habitualmente dan clases de castellano. Nuestro amigo Donald Curtís, o Curtís Garland ha publicado últimamente LA CONJURA con gran éxito de ventas, así como YO, CUTIS GARLAND, que no es otra cosa que sus memorias.
Recuerden muchos de nuestros amigos que frecuentan este Centro de Día de Mayores el rito de cambiar estas novelitas en la imprenta aquella llamada de Los Leones, o en los kioscos del pueblo, esta lectura significaba un movimiento cultural hasta ahora no bien reconocido, pero que no cabe la menor duda que ha existido y existe aunque este sistema haya fenecido en los últimos años, si bien editoriales espabiladas y sin escrúpulos estén reeditando el fruto del trabajo de estos escritores sin pagarles ni un euro.
[Publicado en la revista de “Información del Centro de Día de Mayores de Montilla” en julio 2009.]
JOSÉ PÉREZ MERINO
